El sábado pasado jugamos
contra el Aluche A, un equipo bueno. El
primer cuarto lo jugamos con intensidad y buen juego, pero los siguientes
cuartos no fueron tan bien. Ahí fue cuando se noto que el jueves anterior no
entrenamos con ganas y pasamos de lo que nos decía el entrenador. Los pases nos
salían mal, no entrábamos bien a canasta, tirábamos de cualquier forma,
hacíamos muchas faltas... El segundo cuarto parecía que el balón no quería meterse
en la canasta pero por lo demás bien. El tercer cuarto no salíamos de la
presión, nos fintaban muy fácilmente. Pero el peor fue el cuarto; nos marcaron
¡¡10!! Puntos cuando nos cogían el balón al sacar. La mayoría del cuarto
estuvimos defendiendo.
Lo que me gustó de ese
partido fue que los jugadores de campo
no nos rendíamos, en vez de que por cada canasta que nos metieran nos
deprimiésemos era al revés, no bajábamos la cabeza y seguíamos luchando.
También se vio
que nos animábamos mucho. Me gustaría destacar que fue un partido en el
que se lesionó Andrés, pero en ese momento se demostró honestidad y respeto ya
que todo el otro equipo se preocupó por él.
Creo que todos hemos
aprendido la lección de que hay que entrenar al máximo y no protestar a las
decisiones del entrenador.
Mario Bravo
Jugador del equipo Infantil Masculino CD Lourdes
Gracias, Mario.
ResponderEliminarPienso que aunque Aluche es un buen equipo, no hay tanta diferencia con el nuestro como para que nos saquen esa diferencia de puntos. Tenéis que aprender que un entrenamiento que "pasáis" de lo que decimos en un entrenamiento perdido y luego se nota en los partidos contra los equipos que entrenan fuerte de verdad.
Buen estreno en el blog, Mario!!!
Adán